Himno de la Universidad Nacional de La Plata
Himno de la Universidad Nacional de La Plata
Si suena un claro canto en la noche
de ronda vamos, somos canción.
Gastar veinte años es un derroche
que nunca tuvo comparación.

Mas si en la noche de una honda calma,
vibra un silencio de eternidad,
es que meditan con toda el alma,
los estudiantes de la ciudad.

¡Alta la mente! ¡Nobles los labios!
Y para todos el corazón.

Hace a la vida cabal regalo
el que ama ideales con mucho amor,
ya nos dijeron que el mundo es malo,
por obra nuestra será mejor.

En la más joven urbe argentina,
nuestra alma mater buscó su honor,
ved esta gloria tan peregrina,
la hoja es tan nueva como la flor.

Hogar dichoso de casa nueva,
nos ilumina nos da calor,
pues como viva llama se eleva,
en ella el nombre del Fundador.

Aquel anciano de gran linaje,
casi un hermano del buen Kabir,
cuyos ensueños hechos celaje,
se iban al cielo del porvenir.

¡Alta la mente! ¡Nobles los labios!
Y para todos el corazón.


Letra: Arturo Capdevila
Música: Carlos López Buchardo

Ambos Profesores de la Casa. Se cantó por primera vez el 23 de octubre de 1927, en la sala del Teatro Argentino de la ciudad de La Plata, Argentina. Aún no había sido aprobado oficialmente, se cantó en un acto organizado por la Universidad, en el Teatro Argentino, para conmemorar el centenario de la muerte de Ludwig Van Beethoven. Su interpretación estuvo a cargo de la orquesta del Teatro Colón de Buenos Aires dirigida por el Profesor de la Escuela de Bellas Artes Adolfo Morpurgo.


Jorge Alejandro Panei